Por María Jaramillo Alanís
La mañana del lunes, un grupo de “porros” del profe Arnulfo Rodríguez Treviño, dirigente de la Sección 30 del SNTE, en Tamaulipas, intentaron por la fuerza suspender clases en la escuela primaria Matías S. Canales, exigiendo al director del plantel, Gilberto Ruíz Hernández, para que sacara a los más de 500 alumnos de la escuela y cerrara las puertas del inmueble.
Ante la negativa de su compañero Gilberto, los insultos y amagos subieron de tono y, los agresores, abandonaron el lugar cuando acudieron al llamado del directivo, docenas de enardecidos padres y madres de familia.
Por voz del profesor Ruiz Hernández, se supo que los provocadores responden a las órdenes del delegado sindical y además de cerrar la escuela, quisieron forzar a los mentores a que se sumaran, en contra de su voluntad, al paro loco de Arnulfo e incondicionales.
Sobre este problema, la Secretaría de Educación ha documentado numerosas situaciones semejantes que, obviamente, van en contra de la ley, al igual que toda la movilización magisterial encabezada por Arnulfo y alentada por connotados panistas-cabecistas.
Al respecto, el Director Jurídico de la Secretaria de Educación de Tamaulipas (SET) José Antonio Leal Compeán, afirmó que quien obliga o amenaza la participación libre en las manifestaciones o suspensión del servicio educativo, debe ser denunciado ante las autoridades correspondientes.
Leal fue preciso al señalar que este tipo de violencia sindical está penada por la ley y que ningún representante del SNTE puede presionar con suspender salarios, quitar plazas o despedir trabajadores, dado que es una facultad exclusiva de las autoridades de la SET, no del sindicato. Si esto sucede, deben videograbar los hechos para que las instancias judiciales deslinden responsabilidades y apliquen los castigos establecidos en la norma.
La SET, por su parte, llama a la comunidad educativa a guardar la calma y, a los paristas, a privilegiar el diálogo y el respeto para evitar un conflicto mayor y para seguir avanzando hacia la normalización de las actividades escolares.
Arnulfo y su séquito, fueron vistos entrando a Bucareli, citados exprofeso por Luisa María Alcalde, Secretaria de Gobernación, al cierre los profes, no daban “color”.
Ojalá que la Secre de Gobernación le lea la cartilla a Arnulfo y le haga ver que no es prudente testerearle los “ésos” al tigre, que ya fue suficiente de caprichitos.
El paro ilegal y loco de los incondicionales del profe Arnulfo, no solo ha afectado a 700 mil niños que siguen sin tener clases en todo el estado, sino que además, en cualquier momento provocarán un accidente pues beben alcohol en la vía pública o bien serán increpados por los habitantes del sector de Las Flores, Zozaya e Infonavit Tamatán pues han agarrado las jardineras públicos y de los vecinos, como mingitorios y los espacios de estacionamiento como si fueran propios.
Hasta hoy la sangre no ha corrido, pero Arnulfo y el SNTE serán responsables de lo que pueda suceder, pues ya han causado mucho daño a la educación y a la tranquilidad de los victorenses.
Desde Mi Trinchera Vietnamita, más Janambre que nunca.
