Por María Jaramillo Alanís
La instalación del Consejo de Seguridad Pública, después de casi ocho años, demuestra que la seguridad es un proceso que importa al gobierno de la Transformación. Este órgano de consulta no funcionaba, por el simple abandono y descuido de las pasadas administraciones.
Así como este Consejo, se reactivarán todas las instancias de seguridad como parte de las acciones de la 4T para restablecer la paz en el terruño, paz que se perdió gracias a la irresponsabilidad de gobernantes que no les importó la población.
La inseguridad fue parte del desastre, y fue manoseada por las anteriores administraciones. Hay que decirlo, fue eje principal de la calamidad que nos asoló por más de dos décadas; la violencia, la inseguridad, fue la causa principal que permitió la quiebra de las financias estatales, prohijó la pobreza, la corrupción y la política de dejar hacer y dejar pasar.
Hoy, las cosas empiezan a cambiar, con gran esfuerzo continuado del gobierno de Américo Villarreal, mientras algunos y algunas, le apuestan a la ingobernabilidad a través de falsas noticias y hacer creer que la violencia es generalizada, los resultados se ven en la calle.
De momento Tamaulipas aparece en el “top ten” de los estados más seguros, sin embargo para AVA es insuficiente, porque el gobernador quiere que nuestro estado sea primer lugar en todos los aspectos.
Uno de los aspectos que se deben fortalecer es la sensación y percepción de seguridad y en ese sentido, Tampico mantiene la percepción de ser una de las ciudades más seguras de México. En Victoria y Nuevo Laredo la percepción ha mejorado de manera muy notable.
Hoy la gente se siente más segura ante la presencia de los sus cuerpos de seguridad y cada vez son más los quienes tienen confianza en las instituciones de seguridad y es por eso que crece el número de denuncias. En el sexenio pasado las víctimas tenían miedo a denunciar porque el riesgo era la revictimización.
La base todo es la construcción de paz, y es por eso que el gobierno de la 4T promueve constantemente eventos de toda índole: Sociales, culturales, deportivos, recreativos, en donde el centro de dichas actividades sean justamente la población.
Al mismo tiempo, Américo impulsa inversiones para el desarrollo en un volumen que marca precedente, porque nunca antes se había hecho.
Atender, apoyar y atender las causas que provocan la inseguridad se da a través de todos los programas sociales en los que también se invierte, como no se había hecho en por lo menos en los últimos 5 sexenios, algo así como 30 años, lo que da una idea del abandono en que pasados gobiernos tuvieron a los tamaulipecos.
El reto lo tiene muy claro el gobernador Américo: Lograr una sociedad que viva con prosperidad, en paz y bienestar.
Para lograrlo se ocupa qué cada secretario y secretaria, respondan con altura de miras, y no en su pequeño coto personal, el bien mayor sigue siendo Tamaulipas, México y la 4 Transformación.
Desde Mi Trinchera Vietnamita, más Janambre que nunca.
