Por María Jaramillo Alanís
Desde Mi Trinchera…
En el discurso del nuevo gobierno de Tamaulipas, que encabeza Américo Villarreal Anaya, existe congruencia entre lo que dice y hace. Como botón de muestra es el combate frontal a la estela de corrupción institucionalizada que dispersó el anterior gobierno, que más bien deberíamos llamar a los panistas; pandilla organizada para delinquir.
Aunque, es verdad, la molestia de la burocracia estatal, pues a algunos “operadores” de los azules, se han colado a diversos puestos en la estructura estatal, pero esa, como decía aquel viejo comercial, esa es otra historia que en breve contaremos.
Lo cierto, les guste o no, la 4T en la entidad ha iniciado con la tarea titánica de rescatar instituciones que fueron usadas para el saqueo y la devastación sin límite, hay que decir que se enfrentan verdaderas emergencias para mantener la administración en funcionamiento.
Las urgencias van desde la obtención de recursos financieros, depurar la plantilla de personal en la que estaban enquistados en las distintas secretarías, es decir, “aviadores”, y un sin fin de gente que cobraban a cambio de prestarse al juego de “factureras”, empresas fantasma y contratistas favorecidos con contratos millonarios sin tan siquiera preocuparse por cubrir las apariencias, creyendo que la impunidad los protegería más allá del sexenio cabecista, concluido en medio del rechazo generalizado.
Algunas secuelas de aquella pesadilla son, además del saqueo presupuestal y el endeudamiento injustificado, la bancarrota de COMAPAS, la expedición de notarías vía “fast track” y el blindaje para funcionarios “carnales” que no son otra cosa que cómplices heredados a manera de incondicionales para cubrir las espaldas.
Reconstruir el gobierno tamaulipeco es una labor de gigantes, de personas que de verdad aman a Tamaulipas y a los tamaulipecos, lo bueno de todo es que la administración de Villarreal Anaya ya empezó a cumplir con el mandato de las urnas.
Citemos algunas de las acciones que demuestran que hay voluntad para atender los reclamos populares, entre otras:
1.-El cese del Fiscal anticorrupción, Raúl Ramírez Castañeda, quien interpuso amparo, sólo para alargar un trámite que no tiene reversa.
2.- El rescate de las COMAPAS (municipales), convertidas en “cajas chicas” de políticos corruptos y parientes impresentables. La bomba estalló en Tampico, donde el daño patrimonial podría ser por varios cientos de millones de pesos, que han ido a parar a los bolsillos de potentados panistas, entre los que destacan Ismael García Cabeza de Vaca, Jorge Federico Rivera Schotte, es decir, familiares y socios del exgobernador, hechos denunciados por la dirigencia estatal de Morena.
3.- La CEAT ha informado que otros organismos operadores del agua también se encuentran en la mira de la justicia, como el de Reynosa, Ciudad Victoria, Matamoros, Nuevo Laredo, Valle Hermoso y Río Bravo, por presentar los mayores desfalcos.
Aún cuando no se da ha dado conocer el tamaño del boquete financiero que hicieron los panistas en las Comapa’s del estado, al menos sabemos que en la Comapa-Victoria, insistentemente el alcalde Lalo Gattás ha dicho que el organismo está en quiebra con una deuda dejada por Xicoténcatl González Uresti y Pilar Gómez Leal, de más de 400 millones de pesos y que Arturo Soto Alemán dejó sembrados a sus incondicionales que boicotean las tareas cotidianas de la paramunicipal.
4.- Veto a la reelección del Magistrado presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, Horacio Ortiz Renán, cómplice en numerosas acciones encaminadas a torcer las leyes estatales.
5.- Cancelación de Notarías autorizadas al margen de la ley, en los últimos días del sexenio cabecista.
6.- Combate a la corrupción en todas las dependencias, empezando por los contratos incumplidos en el abasto de medicamentos y los recursos escamoteados a maestros y trabajadores de la secretaría de Educación (SET).
7.- Solamente en Salud estatal, Vicente Joel Hernández Navarro ha sostenido que se han descubierto desvíos superiores a los mil 700 millones de pesos por medicinas que no se surtieron.
• Contrato multianual con Intercontinental de Medicamentos S.A. de C.V, por 1,150 millones de pesos, sin suministrar desde el segundo bimestre de 2022, generando desabasto y con precios adulterados.
8.- La secretaria de educación, Lucía Aimé Castillo Pastor, ha identificado 500 contratos duplicados asignados a la misma persona.
9.- La secretaría de Obras Públicas reportó como desaparecidos los expedientes relacionados con la construcción y funcionamiento de los complejos de seguridad pública y las llamadas estaciones seguras en carreteras.
10.- La Junta Estatal de Conciliación registra un rezago de 20 mil casos.
11.- La Auditoría Superior de la Federación ha observado faltantes hasta por 14 mil millones de pesos en el período comprendido de 2018-2021.
Como se lee, de verdad reconstruir las finanzas públicas, la confianza ciudadana en las instituciones, es una tarea titánica, pero empezará por ordenar cada una de las secretarías, tener en la mira a cada servidor público de la 4T, porque ellos y ellas deben recordar siempre “No, mentir, no robar y no traicionar al pueblo” es fundamental para no ser flor de un día, más claro, sus acciones deben estar encaminadas a sembrar para el futuro, de no hacerlo, la 4T, no habrá cumplido con su cometido de transformar de fondo un estado al servicio de la corrupción y de las ambiciones personales.
El colmo del panismo es que con la desgracia que dejaron en Tamaulipas, el encono, y el odio hacia los ciudadanos, se atrevieron en bloque a votar en contra del presupuesto de egresos de la Federación que por primera vez es histórico para Tamaulipas, aún en contra de ellos a nuestro estado le llegarán recursos del orden de los 67 mil millones de pesos.
Celebremos que ha empezado la limpia en las estructuras estatales, y sí, celebremos también que al Dr. Américo, no le temblará el pulso para meter a la cárcel a la caterva de saqueadores.
Desde Mi Trinchera Vietnamita, más Janambre que nunca.